En esencia, los esteroides orales constituyen homólogos sintéticos de las hormonas que segrega naturalmente el cuerpo humano. Su razón de ser reside en la amplificación de la producción de testosterona, una hormona fundamental que influye en ambos sexos. Estimula la reducción de peso, aumenta la resistencia y contribuye al desarrollo muscular.
Es esencial subrayar las facetas terapéuticas que albergan estos esteroides. Más allá del mero aumento muscular, confieren beneficios en términos de fortalecimiento de la densidad ósea, aliviando el malestar de las articulaciones y ligamentos. Estos atributos fomentan colectivamente una mayor resistencia, impulsando a las personas hacia sus aspiraciones de culturismo.